Las modificaciones y adaptaciones estructurales llevadas a cabo por Austria desde su adhesión a la Unión Europea (1995) son considerables, pero a pesar de su importancia, se asimilaron con relativa facilidad. La liberalización en los sectores de las telecomunica-ciones y la energía, así como la privatización de bancos e industrias, son los elementos que paso a paso van creando las condiciones globales necesarias en la actualidad para que Austria pueda mantener su posición en la competencia internacional a comienzos de este nuevo siglo.

Si se toma como referencia el producto interior bruto (BIP) por habitante, Austria es uno de los países más ricos, no sólo de la UE, sino del mundo. A pesar de eso, las múltiples fusiones transfronterizas de empresas (en los sectores alimentario, comercial, bancario y de la construcción por ejemplo) constituyen aspectos relativamente novedosos y modifican paulatinamente las estructuras tradicionales.

Austria forma parte, asimismo, de la zona Euro.

Casi el 47 % de la superficie de Austria está cubierta por bosques. En los 3,9 millones de hectáreas de bosque se producen anualmente 27 millones de estéreos de madera. El 86,6 % de los bosques son de propiedad privada, el 13,3 % pertenece a las autoridades forestales federales austriacas "Österreichische Bundesforste" que, con 1696 asalariados, se ha convertido en una sociedad por acciones. El monto total de transacciones ascendió en 1998 a aprox. 136,6 millones de € y las ganancias a aprox. 9,9 millones de €.

El turismo es uno de los pilares fundamentales de la economía del país. Austria es un territorio montañoso y una de las reservas naturales de Europa central. En 1999 17,4 millones de personas procedentes del extranjero visitaron Austria y 8 millones de austriacos pasaron las vacaciones en el propio país. En total se registraron 112,6 millones de pernoctaciones, de las cuales 81,56 millones fueron de turistas extranjeros.